La desconfianza es contagiosa y conduce al pánico, como ocurre en las corridas cambiarias donde todos/as pierden.
Los climas Orwellianos (George Orwell,
1984) son pésimos para los negocios porque cuando los usuarios pierden la confianza
en un sistema las consecuencias inmediatas son las pérdidas económicas de sus
administradores.
La reciente ingerencia de los servicios
de inteligencia de ciertos países e intentos de control más o menos velados del
Internet o de sus poblaciones logra -tal como se adivina- que los usuarios huyan
de estos “fantasmas persecutorios” No confían ni en la privacidad de los correos
electrónicos a sus madres. Eso.
Si trabajara en Google esto me
preocuparía.
Está ocurriendo en las redes
sociales y los intercambios sociales en general.
Las principales críticas a la red social
y la empresa siempre se han centrado en la supuesta falta de privacidad que sufren sus millones de
usuarios. Estas críticas se acrecentaron en 2013, cuando se descubrió que la Agencia de Seguridad Nacional de Estados
Unidos y otras agencias de inteligencia vigilan los perfiles de millones
de usuarios y sus relaciones con amigos y compañeros de trabajo.13
A eso podemos sumarle las políticas
leoninas de seguridad de las tecnológicas:
“Usted le otorga a Facebook el derecho irrevocable,
perpetuo, no exclusivo, transferible y mundial (con la autorización de acordar
una licencia secundaria) de utilizar, copiar, publicar, difundir, almacenar,
ejecutar, transmitir, escanear, modificar, editar, traducir, adaptar,
redistribuir cualquier contenido depositado en el portal”.
Facebook. Licencia y
términos de uso.
Si a este cóctel explosivo para la
economía le sumamos la interminable crisis económica mundial y las guerras podemos
concluir que este momento económico es muyyyy malo para todos/as como diría CFK
(disculpen los opositores)
Muy fácil.
Para nada difícil.
Todo va sumando leña al fuego …
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