Nuestro
pequeño mundo cambia radicalmente; un terremoto recorre nuestras entrañas y no
es fácil lidiar con él. Se dan explicaciones del estrés, síndrome
post-traumático, lo que quieran, pero todo es poco para dominar nuestra erupción
interior. No pensamos en esto a menudo porque angustia, nos angustia y lo suscita en todos los que nos conocen. Esto
solo quería explicar. Que todo cambia y uno se parece más a un loco que a otra
cosa. Un loco por no poder expresar nuestro dolor. No tiene remedio fácil, no
tiene solución salvo la recuperación de nuestro ser querido. Quizás por eso las
personas recurren a todo tipo de religiones y magias y no los culpo porque es
humano.
Y cuando
nos afecta a nosotros la enfermedad, lo primero que pensamos es que debe haber
algún error… “¿Por qué a mí? Si yo me cuido” como si cuidarse con una buena
dieta y actividad física más alguna vitamina nos inmunizara de la enfermedad.
No. No son cosas que les ocurren a los demás ya que los demás somos todos.
...No son cosas que les ocurren a los demás ya que los demás somos todos.
ResponderBorrarUn fuerte abrazo víctor y todo lo mejor!