martes, 7 de octubre de 2008

EL ETERNO RETORNO



La historia vuelve a repetirse,
mi muñequita dulce y rubia,
el mismo amor... la misma lluvia...
el mismo, el mismo loco afán...

Como niños y mascotas que utilizan técnicas para prolongar espectáculos interesantes, como tirar un objetos o un ovillo de lana al suelo para que alguien lo recoja, o sacarse cincuenta veces el chupete, para que mamá lo vuelva a instalar.
Así trazamos nuestros destinos muchas veces, más que lo conveniente.

La historia es conocida: alguien (yo, tu, él, nosotros) vive una infancia falto de la protección de sus padres, aislado de sus hermanos, o pertenece a una familia pobre y así crece, sin conocer amor ni calor.
Luego sigue en el colegio, rechazado por sus compañeritos y reprobado por los profesores, ni que hablar del director.
Transita diversos noviazgos con un guión por anticipado, es frustrado y abandonado, no encuentra el amor.
Que nunca alcanza los puestos que merece, que gana siempre demasiado poco.
Alguien que no conoce la verdadera amistad, o como dice el tango:

Contame una historia distinta de todas,
un lindo balurdo que invite a soñar.
Quitame esta mufa de verme por dentro
y este olor a muerte de mi soledad...

Contame una historia...
Mentime al oído
la fábula dulce de un mundo querido, soñado y mejor...

Batime que existen amigos derechos,
mujeres enteras que saben querer.
Y tipos con tela que se abren el pecho,
si ven que la vida te puso en el riel...

Contame la justa de un lecho de rosas.
¡Estoy tan cansado de andar por andar!...
Contame una historia con gusto a otra cosa,
y en la piel del alma poneme un disfraz...

No solo se produce porque a la persona le han pasado estas cosas reales, sino también porque sus conductas y sus pensamientos se repiten en el curso del tiempo, y él mismo:

Es un agente activo de crear y estructurar estos guiones de vida, porque si no encuentra la desgracia y el abandono, de alguna forma imperceptible las produce siempre iguales a sí mismas.

Y ahora las malas noticias: no solo los individuos “cavan” su destino.
Los grupos y sociedades también, mi muñequita dulce y rubia.


No hay comentarios.:

Publicar un comentario